La secretaria Janet Yellen recortó más inversiones en un fondo de ahorro para empleados federales y le pidió al poder legislativo que no se demore más en aumentar la capacidad de financiamiento del gobierno de Biden.

La secretaria del Tesoro estadounidense, Janet Yellen, anunció este martes la suspensión de más inversiones en un fondo de ahorro para empleados federales y urgió al Congreso estadounidense a elevar el techo de deuda, luego de que se venciera este plazo la semana pasada.

“Insto respetuosamente al Congreso a que actúe con prontitud para proteger la plena fe y el crédito de los Estados Unidos”, apuntó la funcionaria de la administración de Joe Biden en una carta que fue enviada al Congreso.

Así, a partir de hoy -y tras haber alcanzado el jueves pasado el límite de deuda legal-, el Departamento del Tesoro dejará de invertir en el Fondo de Inversión en Valores Gubernamentales (Fondo G) del Fondo de Ahorro Thrift, parte del sistema de jubilación de empleados federales.

“El estatuto que rige las inversiones del Fondo G autoriza expresamente al Secretario del Tesoro a suspender la inversión para evitar el incumplimiento del límite de endeudamiento”, indicó Yellen sobre esta medida extraordinaria.

Según marca la ley, “el Fondo G se completará una vez que se aumente o se suspenda el límite de deuda por lo que los jubilados y empleados federales no se verán afectados por esta acción”, agregó la funcionaria en la misiva enviada al líder de la cámara de representantes, Kevin McCarthy.

El gobierno de Estados Unidos alcanzó el pasado jueves su límite de deuda legal, lo que llevó al Departamento del Tesoro a recurrir a “medidas extraordinarias” para pagar las cuentas, como la suspensión de algunos pagos a los fondos de jubilación de empleados federales y al seguro social de empleados postales, entre otras duras decisiones.

El recorte de estas herramientas financieras especiales, recordó Yellen, puede extenderse hasta el próximo 5 de junio.

El límite de deuda es la cantidad total de dinero que el gobierno de los Estados Unidos está autorizado a pedir prestado para cumplir con sus obligaciones legales existentes y poder pagar los beneficios del Seguro Social y Medicare, los salarios militares, los intereses sobre la deuda nacional, los reembolsos de impuestos y otros pagos, se indicó.

En forma periódica, Estados Unidos se asoma al default de la deuda nacional porque, a diferencia de otros países, el gobierno federal solo puede emitir deuda hasta el límite establecido por el Congreso, que tiene el poder de elevar ese techo según crea conveniente.

Disputa política
La economía más grande del mundo podría enfrentar una grave disrupción, con los republicanos de la oposición amenazando con rechazar un incremento del tope legal de endeudamiento, lo que podría empujar a Estados Unidos al default.

Los republicanos de extrema derecha, que ahora tienen un poder clave en la estrecha mayoría del partido en la Cámara de Representantes, quieren que Biden acepte recortar el gasto público.

Argumentan que se necesitan recortes radicales para reducir el endeudamiento, que el Congreso generalmente ha acordado aumentar cada año, elevando el llamado techo de deuda.

Pero la Casa Blanca ha dicho que esos recortes afectarían programas clave de gasto militar y de seguridad social, o supondrían nuevos impuestos importantes.

La Casa Blanca también prometió que Biden no negociaría con los republicanos de línea dura dada su oposición “arriesgada y peligrosa” a aumentar el tope de la deuda.

Mickey Levy, de Berenberg Capital Markets dijo que la probabilidad de que el gobierno estadounidense deje de pagar su deuda es cercana a cero.

“Creo que en última instancia (…) habrá un acuerdo para elevar el techo de la deuda, pero de tanto en tanto habrá mucho debate y política rencorosa”, señaló Levy a la AFP.

Sin embargo, si las cosas siguen como están, el gasto seguirá aumentando e incrementando la deuda, dijo, y agregó que una gran parte se destina a programas como la seguridad social y el seguro de salud federal Medicare.

“Simplemente no existe la disposición política para abordar realmente estos programas”, sostuvo.