Cuba dijo este martes que abordará con Estados Unidos temas «importantes y determinantes» a la ronda de conversaciones migratorias que celebrará con Estados Unidos este miércoles en Washington.
La subdirectora de la dirección general de EE.UU. de la Cancillería cubana, Johana Tablada, declaró que la delegación de la isla, encabezada por el viceministro de Relaciones Exteriores, Carlos Fernández de Cossío, que llevará en agenda asuntos que «son preocupaciones del Gobierno cubano y que no están resueltos».
Entre esos temas, Tablada se refirió a «incentivos» que permanecen para la emigración irregular, como «la continuidad de medidas extremas, inhumanas, de cerco, que influyen directamente en las condiciones socioeconómicas de vida de la población de Cuba» y que hacen que muchos cubanos busquen emigrar a EE.UU.
La funcionaria afirmó que el Gobierno de Cuba responsabiliza al de EE.UU. «con esos altos flujos migratorios, y esas medidas extremas que han provocado una amenaza directa al bienestar y al sustento de nuestra población».
«No se va a lograr una migración regular, y no se va a ordenar este tema mientras exista esa política de asfixia contra Cuba», sostuvo en declaraciones reproducidas por medios estatales.
Asimismo, reconoció que el año pasado se registraron «pasos positivos» entre los que destacó la reanudación de la emisión de visado en el consulado estadounidense en La Habana y el otorgamiento de las visas establecidas en los acuerdos migratorios.
La funcionaria de la cartera de Exteriores señaló que la representación de la isla también denunciará «la admisión de personas que llegan de manera irregular a los Estados Unidos», lo que consideró «un estímulo para que otros adopten esa vía no segura».
En concreto, se refirió al caso de un piloto cubano que en febrero pasado sustrajo una avioneta con la que huyó a Miami, y recibió el asilo político, que declaró como un «incumplimiento explícito de los acuerdos migratorios» suscritos entre Cuba y EE.UU. y un «peligro para la seguridad aérea» de ambos países.
Avanzó que además Cuba reiterará en estos diálogos con EE.UU. su solicitud de que se restablezcan los programas de otorgamiento de visas de no emigrantes para que los ciudadanos de la isla puedan visitar a sus familiares residentes en la nación norteamericana.
Esta ronda migratoria se desarrollará marcada por un fuerte aumento de las llegadas de cubanos a las costas estadounidenses, donde en lo que va del año fiscal 2023 que inició el pasado octubre, la Guardia Costera de EE.UU. ha interceptado a cerca de 5.000 balseros cubanos.
La grave crisis económica del país ha intensificado un éxodo migratorio masivo sin precedentes, especialmente hacia Estados Unidos, donde sus autoridades detuvieron a más de 313.000 cubanos en la frontera sur con México, lo cual representa cerca del 3 % de la población total de Cuba.