Al cabo de cuatro años en que Estados Unidos no estuvo dispuesto a sostener intercambios oficiales con Cuba en el tema migratorio, el 21 de abril pasado se reunieron con tal propósito delegaciones de ambos países en Washington DC.
A la altura de diciembre del 2018, después de dos años de justificar el distanciamiento con la Isla utilizando como argumento la ficción de los llamados ataques sónicos, el Departamento de Estado ponderaba con la embajada cubana en Washington la posibilidad de restablecer las conversaciones migratorias, que normalmente se desarrollaban cada seis meses, además de retomar el funcionamiento de la Comisión Bilateral.
No obstante, en enero del 2019 el apparatchik estadounidense fabricó un nuevo obstáculo para limitar la relación bilateral: la presencia supuesta de 20 000 tropas cubanas en Caracas, “para garantizar la subsistencia del régimen de Maduro”. A partir de ese momento las acciones hostiles no cesaron, hasta llegar a la absurda reinserción de Cuba en la lista de países que supuestamente patrocinan el terrorismo.
En aquellos meses, el candidato Joe Biden hacía campaña entre los cubanoamericanos con el proyecto de cambiar ciertas políticas hacia la Isla, mencionando en primer lugar componentes de la llamada agenda familiar: viajes, remesas, servicio consular. Sin embargo, ni en su calidad de presidente electo, ni de presidente en el poder, Biden modificó ninguna de las acciones de su antecesor, que habían llevado las relaciones diplomáticas bilaterales con Cuba a una mínima expresión.
Quince meses después de que Biden tomara posesión, período en el que varios funcionarios de gobierno hicieron declaraciones entre confusas y trumpistas contra Cuba, llegó el anuncio de un primer encuentro entre diplomáticos de ambos países para debatir sobre un solo tema dentro de la vasta agenda bilateral.
La noticia surgió sin mucho aviso previo. Finalmente las conversaciones se extendieron por apenas una jornada y las notas de prensa de ambas delegaciones parecerían coincidir en la esencia del asunto: garantizar una migración regular, ordenada y segura. Sin embargo, las actitudes de cada parte difieren en cuanto al propósito real.
Justo antes del encuentro, el Secretario de Seguridad de la Patria, Alejandro Mayorkas, dijo que los acuerdos migratorios vigentes (son 3) con Cuba habían sido “descontinuados” en la época de Trump. A falta de otros comentarios de la parte estadounidense, esa es una mención que requiere cierta ponderación.
El gobierno precedente, en particular los subordinados directos de Rex Tillerson y Mike Pompeo, desconocieron las obligaciones a las que se sometía Estados Unidos bajo dichos acuerdos y nunca respondieron la solicitud cubana reiterada en varias ocasiones, sobre la necesidad de gestionar de modo directo las preocupaciones que ambas partes tenían sobre esta materia.
Es útil remarcar que el último de estos acuerdos, firmado en enero del 2017, permitió que prácticamente se redujera a cero la emigración irregular de cubanos a Estados Unidos. Cabría preguntarse, por qué la administración de Donald Trump hizo todo lo posible por acabar con un logro histórico, que podía ser referencia para solucionar la situación que en el mismo tema enfrentaba con otros países.
Se ha repetido una y otra vez que Trump asumió una política anti inmigrante, con todo el simbolismo del muro en la frontera con México y las expulsiones masivas de los irregulares. Estas últimas por cierto estuvieron más, o menos, a la altura de las realizadas durante los años de Obama; Biden, por su parte, no ha abandonado tal ritmo. El muro, a pesar de los anuncios y fotos de promoción, quedó inconcluso. Lo que Trump hizo en realidad con todo su histrionismo fue reducirle el precio a la mano de obra inmigrante indocumentada, que normalmente se hace cargo de los oficios más mal pagados en aquella economía, de forma particular en el sector de la construcción, donde el magnate maneja su fortuna. Un inmigrante demonizado y perseguido acepta cualquier oferta de salario, si corre el peligro de ser denunciado y expulsado del país. Just business.
Pero la actitud del equipo de Trump respecto a Cuba fue singular: cortó de un golpe el otorgamiento de visas en La Habana, trasladó ese “servicio” a terceros países, no respetó las cantidades mínimas (20 000 al año) de visas para inmigrantes previstas en los acuerdos bilaterales.
Los flujos irregulares de cubanos hacia Estados Unidos no fueron significativos de inmediato por varias razones: las condiciones económicas en Cuba eran favorables, no habían tenido lugar las medidas de recrudecimiento extremo del bloqueo, no había una demanda acumulada de visas y muchos postergaron sus planes de viajar, ante un probable cambio de política, que podría producirse con la elección futura de un nuevo gobierno.
Para que se tenga una idea del volumen de viajes que se habían regularizado entre Cuba y Estados Unidos, a partir del momento en que tuvo lugar la reforma migratoria cubana, deben apreciarse las siguientes cifras:
En el primer semestre del 2019 las cifras ya indicaban que los totales podrían ser superiores a los del año precedente. En todos esos años las cantidades de viajeros que no regresaban a la Isla en un período de 24 meses posteriores a la salida resultó ínfima. Los que permanecían en Estados Unidos fácilmente podían acogerse a la llamada Ley de Ajuste Cubano y radicar allí sin temor a la deportación.
En todo ese tiempo, los funcionarios estadounidenses solo se referían a los acuerdos migratorios con Cuba para satisfacer el interés devolver a la Isla a aquel que consideraran “excluible”, tanto en la acepción del acuerdo de 1984, como los que habían cometido alguna falta después y ya no eran aceptables en aquella sociedad.
Y entonces llegó el 2020 con su carga particular de COVID19, más la acción estadounidense desenfrenada de convertir a una isla geográfica en una isla económica, desconectada del resto del mundo. Cuba fue la única excepción que Washington hizo, a la hora de no aplicar en toda su magnitud regímenes de sanciones contra terceros, con el objetivo de dar espacio para paliar los efectos de la pandemia.
Los cubanos, que según la ley nacional tienen el derecho de solicitar un pasaporte y viajar al país de destino que decidan, comenzaron entonces a dirigirse a terceros países, con el propósito de llegar al destino final anhelado y prohibido: Estados Unidos.
En consecuencia Washington se dispuso a presionar a terceros para limitar, y en algunos casos cerrar, el acceso a sus fronteras a ciudadanos de origen cubanos.
Empezó a tejerse de nuevo la leyenda sobre la singularidad de la migración cubana, a hablarse de miles de personas “huyendo del régimen” y a citar cifras absolutas sin compararlas con el resto de los países que son grandes emisores. La prensa que ha repetido estos argumentos contra Cuba no ha calculado siquiera que este flujo es apenas una fracción, relativamente pequeña, del total de todas aquellas visas (de inmigrantes más las de temporales) que se han dejado de otorgar en La Habana durante años.
Si el flujo migratorio irregular de cubanos con destino a Estados Unidos que se produce en la actualidad se considera algo singular, imaginemos entonces qué sucedería si Washington aplicara un bloqueo económico, comercial y financiero contra el resto de los países de la región y al mismo tiempo suspendiera los servicios consulares y el otorgamiento de visas en las respectivas capitales.
La historia de las relaciones migratorias entre Estados Unidos y Cuba indica dos conclusiones claras:
Hasta donde se conoce, la delegación estadounidense que asistió a la reunión del pasado día 21 sólo habló de una reanimación limitada de los servicios consulares en La Habana, tanto en cuanto al personal, como al total de visados.
La pregunta que deberá responderse en las próximas semanas es simple: ¿El gobierno de Joe Biden desea realmente normalizar la relación migratoria con Cuba y cumplir con todas las obligaciones existentes bajo los acuerdos bilaterales en la materia, o pretende enrarecer aún más este contencioso y generar una nueva crisis?
Lo que puede resultar incomprensible para muchos es que tanto Biden, como una buena cantidad de sus subordinados en el actual gobierno, fueron parte, o apoyaron, la negociación con Cuba que hizo posible redactar los mencionados acuerdos migratorios de enero del 2017. Lo hicieron bajo el supuesto de que ese resultado se avenía con el interés nacional estadounidense.
Sin embargo, tanto el presidente en funciones como el resto de esos funcionarios se han embarcado hasta ahora en la continuación de una política trumpista, que tuvo como principal objetivo borrar de los libros de historia los aspectos más relevantes del legado del primer presidente negro de Estados Unidos. Parece que en lo que respecta a Cuba se ha vuelto a borrar la tenue línea divisoria entre demócratas y republicanos.
José Ramón Cabañas Rodríguez
Director del Centro de Investigaciones de Política Internacional.
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Buenísimo artículo. 100% de acuerdo.Biden o a confundido el camino,que él prometió cambiar y del cual él participó en su vice presidencia o tiene asesores que lo están embarcando. Ningún cubano que votó x Trump lo va a hacer por Bien por el simple hecho de mantener la política dura con Cuba.
El artículo está bien, pero al leerlo me da la impresión que el problema de que los cubanos emigran es 100% de los americanos, y yo estoy seguro que no es así, por lo que me gustaría ver un escrito en cubadebate que analizará de forma crítica los errores que hemos cometido y por qué nuestros jóvenes la mayoría solo piensa en irse de cuba pues no ven futuro en el país ni a corto, mediano o largo plazo, nosotros podemos influir poco el lo que haga estados unidos, pero necesitamos saber que va hacer nuestro gobierno, como va a evitar que se diga desangrando de profesionales nuestro país, o seguiremos mirando solo para usa.
Cubano 1 erraste en tu apreciación del articulo, pues la culpa del gobierno de USA no es porque los cubanos emigren, sino la forma en que lo hacen, pues los cubanos y toda la humanidad desde que surgió ha emigrado por diferentes motivos y lo seguirá haciendo.
En mi opinión, la clave está dentro de la familia, es cierto que se viven situaciones difíciles producto del criminal bloqueo yanki, pero en el ámbito de la familia, en mi opinión no se está educando a los más jóvenes en el sentido que las soluciones a nuestros problemas está en nosotros, y no en cambiar de país. Es absurdo que personas que viven de forma aceptable lo venden todo y se marchan
El error de que los jóvenes quieran emigrar está dado en gran medida por el inmenso bombardeo que están recibiendo a través de las redes sociales, cosa que no tuvimos nosotros, la negación del efecto del bloqueo, «los jóvenes ven la culpa en el efecto y no la causa», es cierto se ha sido muy paternalista con algunos jóvenes, a mi, mis padres me enseñaron a trabajar, no a negociar, ni a revender, eso causa que muchos en Cuba vivan sin trabajar, con lo cual los que sí trabajamos seamos menos, eso desde el punto de vista ecónomico; motiva que el valor nominal del dinero en Cuba sea menor al valor real de adquisición del dinero, otra causa es la ignorancia especifíca motivada por la falta de cultura de los jóvenes que han retrocedido al acceder a las redes viven un mundo paralelo dónde solo ven una realidad que para nada se ajusta a la Cuba real, el linchamiento de las ideas de desarrollo del país y sus dirigentes las ipercriticas de pasillo dónde solo se ve lo malo y nadie quiere aportar ideas positivas… y esos muchas son causas por los cuales muchos jóvenes quieran abandonar Cuba. Después chocan con la otra realidad cuando logran el sueño porque me lo han contado muchos conocidos y familiares que han llegado allá y me cuentan que tienen que declarar que son perseguidos políticos y que no pueden regresar a Cuba y que tienen que hacerlo así sino pierden los empleos que están controlados por un Grupo de Cubanos que ya no son Cubanos y que son Hijos o desendientes de Cubanos con fuertes ingresos de la «lucha contra Cuba».
DISCULPEME, pero me deja atonito su duda…..Acaso los Cubanos, en su gran mayoria, no emigran buscando mejores condiciones Economicas ?…Acaso no tienen mejores condiciones economicas en este su pais, a causa de un feroz BLOQUEO, que ya dura más de 60 años, y que limita, entorpece, dificulta,e impide un mejor, más eficiente y normal desarrollo economico y social de esta nacion….Negar eso por su parte es negar la existencia de ese BLOQUEO Yanqui….Más bien esa parece su intencion. Este pais fuera otro sin ese BLOQUEO, Este pais fuera otro con una relacion normal y civilizada con esa potencia del norte….pero este pais, por demas socialista, bajo esas supuestas condiciones, fuera tambien un mayor «mal ejemplo» para ese imperio y esa es una de las razones de ese Bloqueo que nos provoca todas esas calamidades…Si no estas seguro de que sea responsabilidad absoluta de los Americanos te invito a que pongas ejemplos en los que la influencia del BLOQUEO no este presente de forma directa o indirecta en las causas de nuestros males….Hoy hasta la forma de ser, pensar y comportarnos como cubanos, en nuestro pais y a un por un tiempo fuera cuando emigramos, esta marcada por ese BLOQUEO…No lo dudes.
El problema es económico, no se da cuenta usted?
…y porqué durante la pequeña apertura de Obama muchos querían regresar….eso no le dice nada.
Realmente lo miraste pero no lo leíste.
1.Con 20 mil cubanos emigrando regularmente año, más las visas temporales, con posibilidad de ir y venir en aviones y legalmente. ?habría necesidad de arriegarse la vida en la imigración irregular?
2. Sin originar pérdidas al país por 12 millones de dolares diarios sólo por concepto de bloqueo ?no habría una mejor situación económica para todos?
3. Los jóvenes no se van buscando un «futuro»se van a buscar un bienestar del presente , porque contradictoriamente van a un lugar donde la mayoría no puede realizar su futuro:
Yo al menos conozco 3 personas con sueño tronchados:
Mi prima era Médico de la Familia y quería hacerse cirujana. Hace dos años trabaja de envasadora en una fábrica de golosinas. Está aquejada de problemas de salud con la cervical y no hace mucho se le «escapó» Estoy bien, pero aquí si ni de médico ni de cirujana.
Un amigo arquitecto: lleva casi un año trabajando en una Lavandería , acumulando dinero, viviendo con el hermano (que está al sacarlo de la casa) para sacar papeles y buscarse «un trabajito mejor» . Ya no es ni la misma idea , ni el mismo tono ; ya no es «usted es Doctor en Ciencias, es un viejo ya, tiene un nombre, aquí no voy a hacer nadie ;yo me voy a hacer del mío.»
Madre de amiga: Mijo, no sé como no te has ido; «Lisbeth está superbien: ella si es una fiera; está limpiando en la casa de una gente rica». Lisbeth es estomatólogo y cursaba una maestría.
Ya veo que «tener un futuro»significa tener cubiertas algunas ? necesidades? del presente.
Lo mejor que he leído ! Tengo historias similares.
Nadie debe sorprenderse que tanto Republicanos y Demócratas en el Gobierno de los EE.UU actuan en perfecto concierto cuando se trata de hacer daño a Cuba, no olvidemos que son nuestros enemigos, los mismos que nos han agredido por más de 60 años y cuyas consecuencias ya se conocen y se sufren. Yo pienso y quiera Dios que sea así, que algún día sean destruidos como Nación imperialista o se autodestruyan, aunque eso signifique el mal para millones de norteamericanos que no tienen que ver con nada de esa política. Algún día les haremos pagar caro toda la agresión a nuestro pueblo. Que nadie dude, ellos nos quieren destruir, no les importa nuestro bienestar sino convertir a Cuba en el prostíbulo que era antes del 59. Estoy seguro que cualquier resultado positivo al que lleguen estas conversaciones no duraran mucho, en esa plaga de políticos hipócritas no se debe confiar nunca y quien lo haga se autoengaña.
En efecto, todos ellos son nuestros enemigos, y la realidad es que no puede ser de otra manera, por eso no se puede esperar nada de ellos, los problemas cubanos deben ser solucionados en Cuba con nuestros propios esfuerzos, sólo se necesita una buena estrategia.
Execelente y muy ameno artículo, sin medias tintas, muy claro…valdría la pena agregar si se tienen las cifras de la cantidad de cuabanos en estos últimos meses que salieron legalmente del pais con passje de regreso y no regresssron, tambien hay muchos cubanos de los que se cuentan que entraron o estan en tránsito hacia EEUU que no radicaban en Cuba, residian en Uruguay, Perú, Ecuador, Brasil, etc y otros muchos mas que recien abandonan misiones médicas en Venezuela principalmente y brincan a Colambia con igual destino, se cuentan por miles
Todo es verdad solo que en el año 2017 cuba tenia un nivel de vida muy superior al que tenemos y con perspectivas de que fuera mejor siendo hoy en dia todo lo contrario creo que debemos seguir trabajando en la causa de la emigracion que en esta ocasion no son delincuentes los que estan emigrande mucha juventud y mucho personal prepaeado que esta perdiendo en pais la revolucuon creo que debemos trabajar urgente en los problemas que esto va a traer en un tiempo futuro saludos
Usted ha dado en el clavo. Cuba tenía un nivel de vida muy diferente al de ahora en 2017 pero … qué sucedió? Que cambió entonces? Pues sencillo! 243 NUEVAS MEDIDAS DE BLOQUEO impuestas por el señor Trompeta y encima de todo cadi 2 años de pandemia con una economía prácticamente cerrada, con una caída estrepitosa del turismo y del comercio. He ahí la respuesta.
En estos tiempos me parece los que menos emigran son los delincuentes, a río revuelto ganancia del pescador, para que se van a ir ellos si en su rama tienen buena pesca, los que no tienen pesca son los profesionales honestos, y eso es lo peor que puede suceder y el resultado es visible.
Nuestro país tiene que estar sumamente alerta, toda vez que en la actualidad todo indica que están tramando alguna maraña nuevamente con el tema de la emigración, son muchos los pretextos que exponen constantemente para utilizar este tema y enredarlo acorde a sus intereses, ATAQUES SONICOS, VEINTE MIL HOMBRES en Venezuela (pretexto este último escogido por un país que históricamente ha llenado de Bases Militares y soldados el globo terráqueo, bueno dichosa cuba que puede llenar buena parte de ese globo de soldados de la salud, cosa que jamás podrían hacer ellos), con pretextos como estos han interrumpido los servicios de su embajada en La Habana y han proporcionado el sufrimiento y encarecimiento de las gestiones de nuestros compatriotas, teniendo que viajar a terceros países como es el caso de Guyana , donde ven esfumarse los gastos hechos sin lograr el resultado. Es verdad que son muchos los jóvenes que emigran de nuestro país, errores es cierto que hemos cometido que han incidido en esto y hoy qué hay que decir que se proyectan nuevas formadas de tratamiento, pero cubano 1 con todo el respeto que no le quepa duda la influenciada que tiene sobre ellos la propaganda mediática que enarbolan oportunista mente amparada en el genocidio económico que hace más de 60 años llevan a cabo sobre nuestro país y que lógicamente impiden que nuestros jóvenes vean su futuro económico enredado. Es verdad hay errores que han incidido también, pero desgraciadamente también el imperio los ha aprovechado, pero hermano no le quepa duda nuestro país se levanta y rectifica sus posiciones, que le reitero no las podemos desconocer pero nos vamos a sobreponer a ellas. Pero reitero tenemos que tener cuidado con las patrañas.
Todo es simple y macavelico, Garrote (bloqueo), consecuencia enojo con el sujeto equivocado y Zanahoria, (ley de ajuste cubano), si logras progresar en tu país «sin futuro ni oportunidades» y acumulas 10000 dólares, atraviesas todos los obstáculos enojantes y los peligros de selva o mar, te aceptamos en el primer mundo. Solo debes poner un pie dentro de el y decir cualquier cosa mala de tu país.
Es algo difícil de enfrentar por un país pobre y bloqueado, es algo macabro, tramposo y selectivo, no por amor ni admiración a los cubanos, si no, por odio e impotencia ante ese faro americano.
Hay que tener piernas fuertes y amor infinito a la patria cubana y a su revolución para no ser tentados a ser parte de los elegidos selectos al primer mundo, por encima de un francés, sueco, africano o latino que lo haga por necesidad real, pues quien logra 10000 dólares en su país para lograr, no parece ser alguien frustrado y sin futuro en su nación, pues latino que lo dispusiera podría emprender en su país y no perder el tiempo de intentar cruzar una malla más fina que un chícharo por no contar sus nacionales con la sacrosanta ley de ajuste cubano, pues de poner un pie del otro lado se lo cortan y lo retornan cojo y con los dólares consumidos por los traficantes de personas.
Los elegidos no, solo de lograr pisar la talla fronteriza y decir que huye de la dictadura cubana, es abrazado, aparece y hace fama en la prensa, le gestionan trabajo, albergue y pensión hasta que labore.
Creo que se debe analizar el problema de los profesionales de la medicina y la migración, los bajos sueldos en comparación con otros sueldos pagados a otras esferas de la población creo sea la causa fundamental de la deserción y la migración de nuestros profesionales, tienen que analizar a fondo y buscar soluciones a eso.
Generar una nueva crisis es lo que siempre han hecho y querido,nunca con verdadera franqueza e intenciones han querido que suceda un acercamiento y unas buenas relaciones, porqué?,eso ya lo sabemos,siempre han deseado y querido un cambio de sistema y por consiguiente un cambio de régimen,hay que seguir lidiando con toda ésta política aberrante y retrógrada impuesta hace más de 60 años.El pueblo cubano vencerá.
Buen artículo. Pone de manifiesto la manipulación política por Washington del fenómeno migratorio cubano con claros propósitos subversivos. Desde el triunfo de la Revolución Cubana la política migratoria ha sido un componente principal del diseño subversivo contra Cuba, dirigido a desestabilizar y desacreditar al Gobierno cubano.
Quisiera que en las conversaciones migratorias se tocara el tema de la negación de las visas( ESTA)a ciudadanos cubanos Europeos y Chilenos, eso no se puede pasar por alto ya q miles de cubanos viajaban de forma regular y segura a visitar a sus familiares y la nefasta y absurda administración Biden a acabado con eso
Muy buen artículo, la emigración es un tema de primer orden. Es cierto que son muchos los cubanos- residentes y no residentes en nuestro país- que se han aventurado a viajar a los Estados Unidos. También los hay de otras regiones de Latinoamérica, ojo porque cuando esos emigrantes divulgan los videos refieren que todos son cubanos y no es tan así. Analicemos que en su mayoría venden sus propiedades para sufragar el viaje, señal que no estaban tan mal y en ocasiones son personas que no tenín tanta necesidad, solo quieren más comodidad. Y qué me dicen de a qué se están dedicando allá. Si, tenemos problemones, no hay casi nada, pero la mayoría no quiere trabajar, solo vivir del pimpineo y el negocio y si es del desvío de recursos mejor porque ahí no invierten nada. Ese es el problema mayor
La pregunta de si el gobierno de Joe Biden desea realmente normalizar la relación migratoria con Cuba y cumplir con todas las obligaciones existentes bajo los acuerdos bilaterales en la materia, o pretende enrarecer aún más este contencioso y generar una nueva crisis, no admite otra respuesta que No desea realmente avanzar seriamente en el tema. Es evidente que la pretensión estadounidense es la misma que la expresada por el ExSubsecretario de Estado Lester Mallory, es decir, provocar el descontento interno por todas las visas posibles y aprovechando el recrudecimiento de la crisis economica provocada por la Covid y el reforzamiento del bloqueo, dificultar aún más las salidas ordenadas y legales que contemplan los acuerdos migratorios, dificultar los mecanismos de obtención de visados en terceros paises de manera que más cubanos estuvieran descontentos dentro de Cuba y favorecer el malestar y posibles revueltas internas que den al traste con nuestro gobierno socialista. De no ser así no autorizarían entrar a sus fronteras a todo aquel que se arriesgue, gaste o se exponga a los peligros de las salidas ilegales o a través de terceros países. Las conversaciones son siempre importantes y demuestran que aun podemos conversar sobre temas por mas complicados y escabrozos que sean pero no creo que pensaramos que iban a ser diferentes los resultados. Mas que un acuerdo, pudieramos hablar de incumplimiento de los acuerdos por parte de EEUU mientras Cuba continua exigiendo la migracion legal, organizada y segura en defensa de las vidas de nuestros compatriotas y detener el sufrimiento de muchas familias. Cuab continuará avanzando en sus política migratoria permitiendo las salidas y regreso al país de todo cuidadano apto para ello, mientras EEUU continuará utilizando el tema migratorio como arma de presión política en favor de sus intereses mezquinos de engañar a la opinión pública internacional y favorecer los intereses de la contrarrevolución contraria a una verdadera mejoría de las relaciones bilaterales entre EEUU y Cuba porque les afecta su luccrativo negocio.Gracias
parte que nos corresponde de un
No cabe dudas que el gobierno de Estados Unidos al no cumplir con los acuerdos migratorios, y hacer ver a Cuba como la causante de todas las dificultades que tenemos, ha provocado una migración desprovista de seguridad para las familias que se aventuran a dejar el país a toda costa sin tener la certeza de llegar, muchos han perdido la vida, otros miembros de su familia, es triste ver cuántas vidas perdidas innecesariamente cuando se les podía asegurar una migración segura a los cubanos. Todo esto da lugar al tráfico de personas, estafas, entre otras consecuencias fatales.
Yo quisiera ver qué haría el gobierno norteamericano, aún sin extender el bloqueo a que nos somete, si promulgara una *Ley de Ajuste Latinoamericano* y que cualquier nacional de la región que llegara a la frontera, hiciera un cuento de «miedo creíble» y pa’dentro, con residencia al año y un día y camino abierto a la naturalización… Ni con el ejército podrían detener la avalancha de gente!!!
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José Ramón Cabañas Rodríguez
Director del Centro de Investigaciones de Política Internacional.
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